Oración del Ángelus en San Pedro
Con ocasión de la solemnidad de la Epifanía del Señor el santo padre Benedicto XVI se asomó para recitar la oración mariana del Ángelus con los fieles y peregrinos que concurrieron a la plaza de San Pedro.
«Celebramos hoy la solemnidad de la Epifanía del Señor. Es una fiesta muy antigua, que tiene su origen en el Oriente cristiano y pone de relieve el misterio de la manifestación de Jesucristo a todas las gentes, representados en los Magos que vinieron a adorar al Rey de los Judíos recién nacido en Belén, como narra el Evangelio de Mateo (cfr 2,1-12)», dijo Benedicto XVI, antes de la oración mariana.
«Esa ‘nueva luz’ que se ha encendido en la noche de Navidad comienza hoy a resplandecer sobre el mundo, como lo sugiere la imagen de la estrella, una señal celeste que atrajo la atención de los Magos y que los guió en su viaje hacia la Judea», añadió. Pero, más allá de su posición geográfica, explicó el santo padre, «para todos los pueblos vale la palabra de Cristo: ‘Yo soy la luz del mundo; el que me siga no caminará en la oscuridad, sino que tendrá la luz de la vida’. Jesús es el sol que aparece en el horizonte de la humanidad para iluminar la existencia personal de cada uno de nosotros, y para guiarnos a todos juntos hacia la meta de nuestro peregrinar, hacia la tierra de la libertad y de la paz, en la cual viviremos por siempre en plena comunión con Dios y entre nosotros».